Mommy, I would eat those giant empanadas! These were my son's words to tell me that he was already hungry and wanted to have breakfast, and these giant empanadas provoke anyone with that golden color, which can easily make you fall into temptation.
That's how we decided to visit Bite and Sauce, a small restaurant that is making a big splash in the city of Mérida. Today I left home very early, in the company of my son, we never go out without breakfast, but today I wanted to have a little date with my son, after doing some errands and of course surprise my husband with a different breakfast, since I work all night and surely he would wake up late, very hungry.
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Entering the place was comforting, it is always nice to see the place clean and with a great aroma that awakens your senses. I really liked the interior design, minimalist and modern. I love the details of the ceiling, which enhances geometric shapes in a subtle and harmonious way.
The visual marketing of the place is ingenious and attractive; without a doubt, it is a great strategy for food places. Without realizing it, customers can connect with them, with these simple things, a visually pleasing and aesthetically pleasing place.
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Here I learned about some types of empanadas that I had no idea existed, like the church empanada or the punk and pretentious empanada. I would try them all, of course I would. But little by little, because we must keep a balance between tasty and healthy.
And of course I remembered the anatomy of the empanada and it is that they even give us a moment of reflection. Venezuelans usually say that the right way to eat an empanada is one bite and from the second bite onwards, bite and sauce. We do love sauces and with this name I expected the sauce to be a big protagonist at the table and I was not disappointed.
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We were offered ground beef, chicken and cheese empanadas; there were only a few left. My son did not hesitate to order them with cheese, something that did not surprise me at all, because he loves cheese and I ordered them with chicken.
The empanada is not as big as the poster, but the size is quite big compared to other restaurants, but what really left me satisfied is that they are generous with the filling, they had plenty of cheese, a cheese with a delicious flavor and a nice texture.
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The chicken in the stuffing had a well-balanced vegetable stew, the perfect stuffing for a crispy crust and a seasoning that made the price worth it.
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Of course we accompanied the empanada with a malt, a drink that is an icon in our country. One for both of us, because although I love it, I am never able to drink a whole one.
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We were served 05 types of sauces, bacon, spicy, barbecue, tartar and cheese, all had a good thickness and an incredible flavor, impossible not to follow the bite and sauce routine with these creamy delights, my favorite was the spicy one, it looked like a kind of mayonnaise with vegetables with a slight spicy flavor that made you want more. My son was fascinated by the tartar and barbecue.
After this delicious breakfast, we ordered some more for my husband and went back home, to continue with our daily routine. I am happy to share this experience with you. Remember that everything prepared with love is delicious.
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Mami, ¡yo sí que me comería esas empanadas gigantes! Estas fueron las palabras de mi hijo para decirme que ya tenía hambre y quería desayunar y es que estas empanadas gigantes provocan a cualquiera con ese color doradito, que puede hacerte caer en tentación fácilmente.
Así fue como nos animamos a conocer Mordisco y Salsa, un pequeño restaurante que está dando de qué hablar en la ciudad de Mérida. El día de hoy salí muy temprano de casa, en compañía de mi hijo, nunca salimos sin desayunar, pero hoy tenía ganas de tener una pequeña cita con mi hijo, después de hacer algunas diligencias y por supuesto sorprender a mi esposo con un desayuno diferente, ya que trabajo toda la noche y seguro despertaría tarde, con mucha hambre.
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Entrar al lugar fue reconfortante, siempre es agradable ver el sitio limpio y con un gran aroma que despierte tus sentidos. El diseño interior me gustó mucho, minimalista y moderno. Me encantan los detalles del techo, que realza formas geométricas de manera sutil y armónica.
El marketing visual del local, es ingenioso y atractivo; sin duda, es una gran estrategia de los sitios de comida. Sin darnos cuenta, los clientes podemos conectar con ellos, con estas sencillas cosas, un lugar visualmente agradable y estético.
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Aquí aprendí de algunos tipos de empanadas que no tenía idea que existían, como la empanada de iglesia o la empanada punk y pretenciosa. Las probaría todas, claro que sí. Pero poco a poco, porque debemos mantener un equilibrio entre lo sabroso y lo saludable.
Y por supuesto recordé la anatomía de la empanada y es que ellas nos dan hasta un momento de reflexión. Los venezolanos solemos decir que la manera correcta de comerse una empanada es un mordisco y del segundo en adelante mordisco y salsa. Sí que adoramos las salsas y con este nombre esperaba que la salsa fuese una gran protagonista en la mesa y no me decepcionaron.
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Nos ofrecieron empanadas de carne molida, pollo y queso; ya quedaban pocas. Mi hijo no dudó en pedirlas de queso, algo que no me sorprendió para nada, porque ama el queso y yo las pedí de pollo.
La empanada no es tan grande como el cartel, pero el tamaño es bastante grande en comparación a otros restaurantes, pero lo que realmente me dejó satisfecha es que son generosos con el relleno, tenían bastante queso, un queso con un sabor delicioso y una textura agradable.
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El pollo del relleno, tenía un guiso de vegetales bastante equilibrado, el relleno perfecto para una masa crujiente y una sazón que hizo que el precio valiera la pena.
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Por supuesto que acompañamos la empanada con una malta, una bebida que es un icono en nuestro país. Una para los dos, porque aunque a mí me encanta, nunca soy capaz de tomarme una completa.
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Nos sirvieron 05 tipos de salsas, tocineta, picante, barbecue, tártara y queso, todas tenían un buen espesor y un sabor increíble, imposible no seguir la rutina del mordisco y salsa con estas cremosas delicias, mi favorita fue la de picante, parecía una especie de mayonesa con vegetales con un ligero sabor picante que te hacía querer más. A mi hijo le fascinó la tártara y el barbecue.
Después de este rico desayuno, pedimos unas más para mi esposo y volvimos a casa, a continuar con nuestra rutina diaria. Estoy feliz de compartir esta experiencia con ustedes. Recuerden que todo lo que se prepara con amor queda delicioso.
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Until next time, a million blessings to your families.
Hasta la próxima, un millón de bendiciones a sus familias.
Fotografías:@doriangel - Edición: Canva
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