Quedé enamorado del sitio, qué ganas de ir. Recuerdo cuando fui a Argentina comer empanadas en luagres pequeños y escondidos por la calle, siempre me gustó esa concepción distinta que tienen de la empanada en comparación a como la hacemos aquí en Venezuela.
Me gustó que tengan esa variedad de sabores, supongo que eso los hará diferenciarse de la competencia.